Probióticos y cólico del lactante

Conoce cuál es el mejor probiótico para los cólicos

ALIMENTACIÓN Y NUTRICIÓN

Tomás Goñi González

12/3/20244 min read

Introducción

El cólico del lactante, caracterizado por episodios de llanto prolongado e inconsolable en un bebé sano, es una de las consultas más frecuentes en pediatría durante los primeros meses de vida. Aunque su causa es multifactorial, se ha identificado la disbiosis intestinal como un factor clave, lo que ha impulsado el interés en los probióticos como tratamiento. En este post revisamos las principales cepas probióticas y sus productos comerciales, incluyendo Reuteri, Colimil Baby e Intestibaby, para determinar su eficacia y respaldo científico.

1. Mecanismos de Acción de los Probióticos en el Cólico del Lactante

Los probióticos tienen efectos positivos sobre el microbioma intestinal, que pueden ayudar en el manejo del cólico del lactante mediante los siguientes mecanismos:

• Restauración de la microbiota intestinal: Los lactantes con cólico suelen presentar una disminución en la diversidad microbiana, particularmente de géneros como Lactobacillus y Bifidobacterium.

• Producción de metabolitos beneficiosos: Favorecen la producción de ácidos grasos de cadena corta, estabilizando el pH intestinal y reduciendo la inflamación.

• Modulación de la motilidad intestinal: Estimulan receptores que regulan el tránsito intestinal.

• Efecto antiinflamatorio: Reducen la inflamación intestinal subclínica mediante la modulación de citoquinas.

2. Evidencia Científica por Cepa Probiótica

2.1. Lactobacillus reuteri DSM 17938

Es la cepa más estudiada y con mayor respaldo científico en el manejo del cólico del lactante.

• Evidencia clínica:

• Sung et al. (2018): Metaanálisis en JAMA Pediatrics que concluye que L. reuteri DSM 17938 reduce significativamente la duración del llanto en lactantes amamantados. Sin embargo, los resultados son menos consistentes en lactantes alimentados con fórmula.

• Indrio et al. (2014): Ensayo clínico aleatorizado que mostró una reducción del 50% en la duración diaria del llanto en lactantes tratados con L. reuteri frente a placebo.

• Savino et al. (2010): Reducción significativa del llanto tras 7 días de uso en lactantes amamantados.

2.2. Mezclas de Probióticos (Multicepa)

Las combinaciones de probióticos han mostrado resultados más variables. Aunque pueden ofrecer beneficios moderados, la evidencia no es tan robusta como para L. reuteri.

• Pärtty et al. (2015): Mezclas como Lactobacillus acidophilus y Bifidobacterium bifidum muestran beneficios en algunos casos, especialmente en síntomas asociados como distensión abdominal.

• Rhoads et al. (2018): Resultados variables en el manejo del cólico.

2.3. Otras Cepas (Bifidobacterium breve)

Cepas como Bifidobacterium breve BR03 y B632 han mostrado resultados prometedores pero menos consistentes:

• Nocerino et al. (2020): Reducción moderada en la duración del llanto, pero con menor eficacia que L. reuteri.

3. Comparativa de Productos Comerciales

3.1. Reuteri (Casen)

• Composición: Lactobacillus reuteri DSM 17938.

• Evidencia: Respaldo sólido por estudios como los de Indrio et al. y Sung et al. que muestran eficacia significativa en lactantes amamantados.

• Posología: 5 gotas diarias (100 millones de UFC).

• Recomendación: Producto de primera línea, especialmente en lactantes amamantados.

3.2. Colimil Baby (Humana)

• Composición: Lactobacillus reuteri DSM 17938 y Bifidobacterium breve BR03.

• Evidencia: Mezcla probiótica respaldada por evidencia moderada; B. breve podría proporcionar beneficios adicionales para la distensión abdominal y la regulación del microbioma. Sin embargo, el nivel de evidencia no alcanza al de productos con solo L. reuteri DSM 17938.

• Posología: 1 ml cada 12 horas (2 ml/día).

• Nota sobre la formulación: Contiene fructosa, lo que puede ser relevante en lactantes con intolerancia hereditaria a la fructosa o riesgo de caries dental. Se recomienda consultar con un pediatra antes de su administración en estos casos.

• Recomendación: Alternativa para casos leves a moderados.

3.3. Intestibaby (MamaNatura)

• Composición: 2 mil millones de UFC por dosis recomendada distribuida en dos cepas (Lactobacillus reuteri DSM 25175 y Lactobacillus acidophilus DSM 24936). Los probióticos multicepa tendrían en comparación con los monocepas, una mayor probabilidad de supervivencia y efectos sinérgicos. Además contiene aceite de manzanilla con propiedades antiinfalamtorias, espasmolíticas y digestivas. También presenta aceite de oliva con propiedades antioxidantes y antiinflamtorias aunque con menos evidencia de efectividad en el cólico del lactante. No contiene conservantes, gluten, lactosa, proteinas de la leche de vaca, azúcar ni saborizantes

• Evidencia: Menos consistente. Ensayos como los de Pärtty et al. sugieren beneficios variables en el manejo del cólico.

• Posología: 10 gotas cada 12 horas (20 gotas al día).

• Recomendación:  aunque se trata de un probiótico multicepa y posee otros compuestos, todo ello teóricamente beneficioso, los probióticos incluidos presentan menor evidencia científica sobre la efectividad en el cólico del lactante

Conclusión

Los probióticos, especialmente Lactobacillus reuteri DSM 17938, representan la mejor alternativa terapéutica basada en evidencia para el manejo del cólico del lactante, particularmente en lactantes amamantados. Entre los productos disponibles:

1. Reuteri Casenbiotic (Casen) es la opción con mayor respaldo científico y se recomienda como tratamiento de primera línea.

2. Colimil Baby (Humana) ofrece una combinación con Bifidobacterium breve, útil como alternativa en casos leves o moderados. Sin embargo, es importante tener en cuenta que contiene fructosa en su formulación.

3. Intestibaby (MamaNatura) alternativa aunque con menor evidencia

Es esencial individualizar el tratamiento, evaluar la respuesta tras 2 semanas e integrar medidas complementarias como ajustes en la técnica de alimentación o cambios en la dieta materna cuando sea necesario.

Referencias

1. Sung, V., et al. (2018). Probiotics to prevent or treat excessive infant crying: Systematic review and meta-analysis. JAMA Pediatrics.

2. Indrio, F., et al. (2014). Probiotics in the management of infantile colic: A randomized controlled trial. Pediatrics.

3. Savino, F., et al. (2010). Probiotics and infantile colic. Journal of Clinical Gastroenterology.

4. Nocerino, R., et al. (2020). Efficacy of Bifidobacterium breve for infantile colic. Pediatrics.

5. Pärtty, A., et al. (2015). Effects of probiotics on infantile colic. Journal of Pediatrics.

6. Rhoads, J. M., et al. (2018). Multistrain probiotics for infantile colic. Clinical Gastroenterology.

Tomás Goñi González