Hitos del desarrollo

Conoce el normal neurodesarrollo de tu hijo con los signos de alarma

DESARROLLO INFANTIL

Tomás Goñi González

12/9/20245 min read

El primer año de vida es una etapa crucial en la que el cerebro del bebé se desarrolla a un ritmo extraordinario. Durante estos 12 meses, el sistema nervioso del niño madura progresivamente, permitiendo el desarrollo de habilidades motoras, cognitivas, sociales y emocionales. Según investigaciones publicadas en The Lancet Child & Adolescent Health, las experiencias tempranas y el entorno afectivo influyen significativamente en la arquitectura cerebral, consolidando las bases para el aprendizaje y el bienestar futuro. En este periodo se adquieren los hitos del desarrollo, que son una serie de habilidades  y comportamientos específicos que desarrollan los niños durante su crecimiento a determinadas edades y que nos ayudan a valorar el correcto neurodesarrollo del niño y detectar posibles problemas de forma precoz.

A continuación, revisamos cada etapa del desarrollo neurológico durante el primer año, con ejemplos prácticos de estimulación y señales de alarma para identificar posibles alteraciones.

De 0 a 2 meses: la adaptación al mundo

En los primeros meses, el cerebro del bebé está enfocado en funciones básicas de supervivencia. Los reflejos primitivos dominan su comportamiento, pero ya comienza a responder a estímulos del entorno.

Hitos del desarrollo:

  • Reflejos primitivos: Succión, prensión palmar y plantar, reflejo de Moro,  reflejo de búsqueda.

  • Reconocimiento de voces: Prefiere la voz materna, escuchada durante el embarazo.

  • Visión: Ve a corta distancia (15-30 cm) y muestra preferencia por rostros humanos.

  • Inicia la sonrisa social: primera sonrisa intencionada hacia otra persona

Ejemplos de estimulación:

1. Contacto piel con piel: Realizarlo tras el nacimiento fortalece el vínculo afectivo y regula su sistema nervioso como demostró el artículo de Moore y Bergman en Journal of Perinatologý, 2016, que además evidenciaba los efectos beneficiosos sobre la regulación del estrés y el apego.

2. Seguimiento visual: Usa objetos en blanco y negro, por ejemplo colgados sobre la cuna, para estimular su visión.

3. Hablarle suavemente: Hazlo mientras lo alimentas o acunas, con frases sencillas. No es conveniente, sobre todo en las primeras semanas sobreestimular al bebé (por ejemplo cantarle y mecerle a la vez,

De 3 a 4 meses: primeras interacciones sociales

En esta etapa, el bebé desarrolla mayor control motor y comienza a interactuar de forma más activa con su entorno.

Hitos del desarrollo:

• Control cefálico: Progresiva mantiene la cabeza erguida durante más tiempo. Ya la cabeza va acompañando al tronco

• Seguimiento visual: Sigue objetos en movimiento con mayor precisión.

• Inicio del balbuceo: Produce sonidos guturales como precursor del lenguaje.

Ejemplos de estimulación:

1. Tummy time (tiempo boca abajo): A partir de los 2 meses se recomienda que dediquéis  unos 10 minutos al día para fortalecer los músculos del cuello y los hombros y favorecer ese control cefálico. La AAP lo recomienda para prevenir retrasos motores y mejorar la coordinación (Pediatrics, 2018)

2. Juego interactivo: Juega al “cu-cu” para estimular su percepción y atención.

3. Sonidos llamativos: Utiliza sonajeros para que gire la cabeza hacia el origen del sonido.

De 5 a 6 meses: exploradores sensoriales

Entre los 5 y 6 meses, los bebés muestran mayor curiosidad por el entorno y comienzan a usar sus manos y boca para explorar. El estudio publicado en Early Human Development, 2019, destaca que la exploración sensorial fortalece las conexiones cerebrales relacionadas con la percepción y el aprendizaje

Hitos del desarrollo:

• Coordinación mano-ojo: Agarra objetos y los lleva a la boca. No debe de haber una preferencia clara en  el uso de una u otra mano, es decir las usan indistintamente

• Reconocimiento de su nombre: Responde girando la cabeza al escuchar su nombre.

• Inicio del volteo: Se da la vuelta de boca abajo a boca arriba y viceversa

Ejemplos de estimulación:

1. Juguetes de diferentes texturas: Ofrécele mordedores, bloques suaves o pelotas con relieve.

2. Lectura interactiva: Léele cuentos con ilustraciones brillantes y deja que toque las páginas.

3. Juego de causa-efecto: Introduce juguetes que emitan sonidos al presionarlos.

4. Se le puede poner en las mantas de juego en el suelo para favorecer esa exploración

5. Sobre los 6 meses se le puede poner sentado, sin forzarlo, y al principio con cojines o almohadas a su alrededor, que le supongan un apoyo para intentar mantenerse sentado

De 7 a 8 meses: la autonomía emergente

A los 7 meses, los bebés comienzan a desplazarse y muestran un mayor interés por explorar el entorno. Su desarrollo social también se intensifica.

Hitos del desarrollo:

• Sentarse sin apoyo: Entre los 6 -7 meses, ya es capaz de permanecer erguido durante varios minutos.

• Desplazamiento: Comienza a gatear o a reptar.

• Ansiedad por separación: Muestra preferencia por cuidadores conocidos.

Ejemplos de estimulación:

1. Circuito de gateo: Coloca cojines y juguetes para incentivarlo a moverse. Aunque es cierto que algunos niños no gatean de forma natural sin que ello suponga ninguna anomalía, el artículo publicado en 2018 en Developmental Psychology, demostró que el gateo está asociado con el desarrollo del córtex frontal y éste con la planificación y la toma de decisiones

2. Juegos de permanencia del objeto: Esconde un juguete bajo una manta y anímalo a buscarlo.

3. Exploración segura: Crea un espacio libre de peligros para que pueda explorar libremente.

De 9 a 12 meses: primeros pasos hacia la independencia

El bebé cierra su primer año con grandes logros, como los primeros pasos y las primeras palabras. También desarrolla una mayor comprensión del entorno social.

Hitos del desarrollo:

• Primeros pasos: Camina con apoyo y, en algunos casos, sin él. El artículo de Smith y Thelen en Neuroscience and Behavioural Reviews, 2021, relacionó los primeros pasos con la mielinización de las vías motoras, de ahí la importancia

• Lenguaje inicial: Usa palabras simples como “mamá” o “agua”.

• Imitación: Copia gestos como aplaudir o saludar.

Ejemplos de estimulación:

1. Apoyo para caminar: Coloca muebles bajos para que se sostenga mientras camina. Aquí es importante vigilar el entorno para prevenir accidentes

2. Libros con texturas: Ofrece libros interactivos para reforzar el lenguaje.

3. Imitación de gestos: Anímalo a aplaudir contigo o a decir “adiós” con la mano.

Señales de alarma en el desarrollo neurológico

Aunque cada niño tiene su propio ritmo y hay intervalos de edades para la aparición / desaparición de estos hitos, es importante estar atento a señales que puedan indicar retrasos en el desarrollo:

0 a 3 meses:

• No reacciona a sonidos fuertes en el primer mes. En este punto es importante realizar la prueba de las otoemisiones acústicas a todos los recién nacidos y en caso de sospecha valorar realizar los potenciales evocados auditivos.

• No fija la mirada en rostros cercanos. Descartar patología ocular (cataratas, glaucoma,..)

• No levanta la cabeza estando boca abajo.

4 a 6 meses:

• No sonríe socialmente.

• No intenta agarrar objetos o no lleva cosas a la boca.

7 a 9 meses:

• No se sienta sin apoyo.

• No muestra interés por desplazarse.

10 a 12 meses:

• No dice palabras simples ni responde a su nombre. 

• No intenta ponerse de pie o caminar con apoyo.

Tanto la deambulación sin apoyo como la aparición de las primeras palabras puede retrasarse incluso hasta los 18 meses aunque es importante estar atento a estos hitos por su importancia

Por ello, si notas alguno de estos signos, consulta al pediatra. Las evaluaciones tempranas permiten intervenciones oportunas que pueden marcar una gran diferencia en el desarrollo del niño.

Conclusión

El desarrollo neurológico del bebé durante el primer año es un proceso dinámico y fascinante, influido tanto por la genética como por el entorno. Proporcionar un ambiente rico en estímulos, lleno de afecto y seguridad, es esencial para que el niño alcance su máximo potencial. Si observas señales de alarma, busca ayuda profesional. La detección temprana es clave para el éxito de cualquier intervención.

Tomás Goñi González